Diario del ostracismo. día 4
Día 4
Inquilina de buenos aires me escribe una progre para comprarme una clase como referencia para qué? ¿Un descuento? ¿A una mujer sola y discapacitada que vive en el ostracismo para que mediocres como ella jueguen a la normalidad (después hablamos de cómo se está terminando nuestro tiempo de vida, SÍ el TUYO también-)? Pero si yo te conozco, yo sé quién sos y por quién te estás haciendo pasar. Con el violín mas chiquitito del mundo voy a contar la historia mas triste del mundo…
¿Y si partimos de cómo podrían haber sido las cosas si desde el día 1 de enterarnos hubiéramos usado un Kn95 sin concesión, sin indulgencias, con disciplina y autogobierno? No es que me pierda en la nostalgia de lo que me fue negado porque entendí bien, Gabrielle Wittkop, que ese era el precio de las cosas raras; sólo que me pregunto qué se podría haber evitado; qué podríamos haber logrado; qué podríamos haber conseguido; qué podríamos haber cambiado. Mitigar contagios, reorganizar el mundo social en torno a los mas vulnerables, simbiosis, cooperación, mutualismo. Fallarnos mutuamente ante la propagacion del Covid es y siempre será una catástrofe que ha demostrado que no podemos nada y roto todas las ilusiones. Domados que se creen domadores, podríamos haberlo hecho, teníamos cómo con algo de ingenio. Tanto les gustaba lo que había que aceptaron su peor versión.
Siempre seré una asquerosa, cursi, romántica idealista pero es que esto me es insoportable. Hubiera querido nacer sin ideología tanto como hubiera querido creer en dios. Me habría ido mejor. Habría sido feliz y sometida y adaptada a mi destino.
Se corrió el límite de lo admisible en todos los planos. En el íntimo relacional también. No solo yo perdí, claro, está, ni los 3 gatos locos que ustedes creen que somos ya no digo las personas discas o inmunosuprimidas, sino aquellas que no queremos enfermar más; ustedes también perdieron una gran cantidad de cosas que los progres le llamaban progreso y que ya no existe. De la erradicación de enfermedades a punta de vacunación hasta la posibilidad ya ni digo de comprar una casa sino de pagar un alquiler por eso las nenas de la hipogresía que se dedicaron a ponerme el palo en la rueda añosssssss, la que no se agenció, la que dejó de usar la mascarilla, la que nunca se preocupó u ocupó ahora me pide justo a mi la escupidera. 5 años sin comunicarse y ahora cagada en las patas porque efectivamente por medios democráticos los nazis están en el poder, como siempre, y van a mostrar cuán derechos y humanos son, se acordó de mí y quiere una guía espiritual. Llegás tarde.
No solamente ya no soy relevante laboralmente, la muerte disca, sea dicho de paso, no poder trabajar, en un país casi sin paupérrimas pensiones por discapacidad. No soy suficientemente disca ni para esa miseria que alcanza para una compra semanal en el supermercado literal. También perdí a mis amistades, en serio, como Pulgarcito en el bosque. Se ve que yo creía que tenía amistades que en realidad eran imaginarias. Mis amistades son como esas personas que creen que luchan para que el gobierno no abandone a los viejos a una muerte por inanición pero ni mitigan contagios y abandona a sus propia gente a su propia suerte. Cuando les dejé de servir para lo que sea que me estaban usando, se fueron. Creo que el mundo se volvió varón en el sentido SCUM de la palabra. ¿Hay algo mas emblemático que los padres ausentes? Por eso lo digo, son todos hombres y por supuesto son todos, todas, todes, buenxs. Los malxs también se perciben así, sino fijate Calígula y sus fuerzas del cielo, del bien.
Creí creer saber cómo fue antes en algún que otro lugar, pero aquí y ahora la amistad deja de funcionar en cuanto la realidad exige modificarse; al menos en el plano material. O dicho de otro modo, la amistad es totalmente superflua o virtual. Descubrí de la manera más dura que mi nueva realidad significaría modificación de la realidad ajena si querían frecuentarme o continuar conmigo y que donde me toca estar nada ni nadie va a modificar nada ni por mi ni por nadie realmente ni lo mas mínimo. Así que sencillamente hacen de cuenta que no existo. O me dicen loca. U obsoleta mientras cobran sus suelditos fijos en los teatros nacionales y pelean eternamente con sus novios hippies. Sinceramente, espero que se les prenda fuego la casa.
Comprendo perfecto los problemas son estructurales, pero no me digas que nada cambia sin el 90% de la población mundial toda junta y mas o menos al mismo tiempo abandona una costumbre prescindible porque no es cierto. ¿Acaso una estructura no puede ser un entramado que se crea a partir de muchas deserciones que se van produciendo? Como los hippies. Ya sé en qué terminó todo eso. Lo sé bien. Pero ¿cómo hace los arboles en los bosques con los que tocones que los necesitan?